El MEIAC y el MACE de Elvas estudian cómo coordinar fondos y exposiciones. El MACE de Elvas. el bello edificio de un antiguo hospital que ...
Foto hombres de política y también saben de medicina y salud, etc,.
El Museo Extremeño Iberoamericano de Arte Contemporáneo
de Badajoz (MEIAC) y Museo de Arte Contemporáneo de Elvas (MACE)
firmarán este año un protocolo-puente de colaboración que estrechará aún
más la buena relación existente entre ambas instituciones artísticas.
En realidad, la firma oficial les corresponderá a la Autarquía de Elvas y
a su Cámara Municipal por un lado y, por el otro, a la Junta de
Extremadura, responsable del museo extremeño.
Si la creación del MEIAC supuso un revulsivo y abrió un
campo insospechado de relación entre el arte de uno y otro lado de la
frontera, la inauguración del MACE dio visibilidad al Alentejo en el
panorama artístico portugués y puso en el mapa de la Península un nuevo
centro cultural que atrajo hacia la Raya las miradas de todos los
interesados en el arte.
El MEIAC ha dado cabida en sus exposiciones a todas las
áreas de producción artística en España, Portugal e Iberoamérica, con un
firme seguimiento de los descubrimientos del arte digital para
incorporarlos a sus fondos. El MACE, por su parte, organizó básicamente
su funcionamiento en torno a la Colección 'Antonio Cachola', una
colección privada propiedad de un vecino de Elvas, interesado en la
evolución del arte portugués actual. La Colección 'Antonio Cachola'
cuenta con unas 500 obras y acoge a artistas como José Pedro Croft,
Pedro Calapez, Juliao Sarmento, Jorge Molder y Francisco Troca.
Como comienzo de la privilegiada relación que ambos
museos se reservan para el futuro, el próximo 14 de febrero se
inaugurará en el MACE una exposición de fondos del MEIAC, que llevará
por vez primera obras de su colección a la localidad portuguesa vecina
de Badajoz. Posteriormente, en la primera quincena de septiembre, la
Colección Cachola volverá al MEIAC donde ya se exhibió en 1999, siendo
el primer museo que dio cabida a estos fondos particulares que desde
entonces no han hecho más que crecer y atraer más la mirada de los
interesados en el arte portugués actual. En principio se barajó la
posibilidad de que la firma del protocolo-puente pudiese llevarse a
efecto mañana sábado mismo, coincidiendo con la presentación por la
tarde en el MACE de un libro de análisis y contextualización de la
Colección Cachola, cuyo coordinador editorial ha sido el crítico de arte
y profesor universitario Delfim Sardo. La fecha de esta firma ha estado
pendiente en los últimos días de la agenda de las autoridades españolas
que deben acudir al acto y en la tarde de ayer no parecía inminente que
vaya a llevarse a efecto. Este diario intentó confirmar en la Junta de
Extremadura para cuando está previsto el acontecimiento, pero no obtuvo
contestación.
Por su parte, Antonio Cachola indicó a este diario que,
además del intercambio expositivo, el protocolo entre ambos museos
perseguirá también la producción de exposiciones y conferencias y
otros acontecimientos que tengan que ver con el arte contemporáneo.
Cachola reconoció que la crisis ha ralentizado algo la adquisición de
nuevas piezas para el museo y recordó que los artistas pueden contribuir
a templar el ánimo de los afectados por la crisis y que «hay muchos
ejemplos de buenas creaciones en los momentos difíciles».
TÍTULO: LA COLECCIÓN CACHOLA ES LA COLECCIÓN DE LA DEMOCRACIA PORTUGUESA,.
Delfim Sardo dice que la relación España-Portugal está en el origen de la Colección Antonio Chachola. -¿Cómo ha influido en la colección su ...
Delfim Sardo dice que la relación España-Portugal está en el origen de la Colección Antonio Chachola.
-¿Cómo ha influido en la colección su instalación en el museo situado en el Hospital de Elvas?
-La Colección Cachola es privada, pero con un claro
interés público porque tiene un conjunto de obras que son esenciales en
el arte portugués de los últimos 25 años. Como cualquier colección con
ese tipo de ambición, su aspiración es situarse en un edificio público o
museo para poder ser vista y tener un papel no sólo cultural sino
también social. Desde que está en el Museo de Elvas, ahora ha hecho
cinco años, la Colección Cachola ha crecido y además tiene una relación
efectiva con la comunidad artística portuguesa. Realiza un trabajo
pedagógico y, en una zona que del lado portugués no tenía una presencia
artística tan fuerte como el MEIAC en España, muestra un ejemplo muy
significativo de lo más interesante que se va haciendo en el arte
portugués.
-¿Fue una casualidad que surgiese en la Raya?
-La colección nace de la voluntad de una persona, Antonio
Cachola, que habita en Elvas. Lo natural sería que una colección esté
cerca de la persona que la hace. Tal vez hay otra razón que surge desde
el inicio de la colección y es que hay una relación entre la colección y
Antonio Cachola y el MEIAC que dirige Antonio Franco, que ha definido
una perspectiva muy importante del desarrollo de la zona rayana. Él ha
hecho mucho por ese desarrollo y fue el primero que presentó la
colección en su museo. Fue la primera exposición que se hizo de la
colección: una colección portuguesa que realizó en España su primera
presentación. La relación Portugal-España está en la colección desde el
inicio de su historia.
-En momentos económicos difíciles como éste, ¿qué impulsa a un coleccionista a seguir sus compras?
-La mayor parte de los coleccionistas como Antonio
Cachola, que son apasionados del arte y no toman la colección como una
inversión sino como un proyecto que les da una satisfacción afectiva y
cultural, siguen comprando en tiempos de crisis como los que estamos
viviendo en Portugal y España. Cachola realiza una colección muy
metódica, porque colecciona cosas que le gustan y, sobre todo, elige
obras que cree que son importantes en el contexto cultural. Hay muchos
coleccionista como él, que persiguen una visión material del mundo del
arte. Para ellos, muchas veces esto es mucho más importante que las
dificultades económicas que surgen. Por otra lado, los momentos de
crisis son en ocasiones interesantes para comprar porque los precios no
son altos y hay posibilidad de hacer adquisiciones mejores que de
ordinario. A veces, la crisis para el arte no es tan mala.
-Usted ha escrito sobre la vocación de los museos
para tornar en público lo que, de otra forma, se quedaría en manos
privadas. ¿Cree que la crisis puede llegar a afectar a los museos
públicos de la Península hasta ese punto?
-Lo creo. Ya les está afectando. Y fuertemente. Los
museos públicos han tenido un recorte del presupuesto de entre el 30% y
el 40% y en España los hay que han sufrido este recorte y más. La
programación se vio muy afectada el año pasado y lo será también en éste
y en el próximo. El problema respecto al Arte es que estos recortes
tienen efectos no sólo cuando se materializan, sino que continuarán en
el futuro. El trabajo cultural tiene una continuidad y es muy fácil
acabar y muy difícil recomenzar y empezar de nuevo. La actividad
pedagógica de los museos, su relación con los otros museos de fuera de
la Península va a ser muy difícil en los próximos años.
-¿Podría describirnos la colección? ¿Hay algún artista 'fetiche'?
-Tiene 90 artistas y alberga unas 500 obras. Presenta un
panorama del arte portugués de los últimos 25 años. Es la primera
colección de Portugal con una importante presencia de los artistas
nacidos después de la Revolución de 1974. Es, claramente, una colección
de la democracia portuguesa. No es una colección histórica, sino del
arte que se ha hecho en Portugal con la democracia. Tiene artistas
jóvenes y otros no tan jóvenes que han hecho su trabajo en el final de
los años 70 y durante los 80. La colección trabaja todas las áreas de la
producción artística, el vídeo, la escultura, la pintura, el dibujo, el
grabado. Hay algunos artistas que tienen una representación tan
importante en ella que podrían obtenerse exposiciones individuales de la
misma, como José Pedro Croft, que es tal vez el artista con más fuerte
presencia aunque quizá sería demasiado decir que es un artista
'fetiche'.
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