TÍTULO: UNA ALTERNATIVA MÁS QUE SOÑADA, TOROS;
Cuando el sábado suenen clarines y timbales en la plaza de toros de Higuera la Real y arranque el paseíllo se habrá cumplido un sueño.foto,.
Diego Ramos se doctorará este sábado en Higuera la Real.
Cuando el sábado suenen clarines y timbales en la plaza de toros de Higuera la Real y arranque el paseíllo se habrá cumplido un sueño. Años de lucha sin perder la esperanza se verán recompensados cuando Antonio Ferrera ceda los trastos a Diego Ramos dándole la alternativa que persiguió durante tanto tiempo.
La historia de Diego Ramos (Oviedo, 1977) es la de una vocación. Ser torero es algo más que lidiar festejos en cada feria. Es sentir la pasión por la tauromaquia más allá de las plazas, en el día a día, y no concebir la vida si no es con el toro en la mente. Aunque la realidad a veces aparte a la persona físicamente de las plazas, la mente y el corazón siempre estarán en ellas.
Algo así es lo que le sucede a Diego Ramos, que nació circunstancialmente en Oviedo, pero que se crió en la localidad salmantina de San Pedro de Rozados junto a sus tres hermanas. Se acercó al toreo por su padre, muy aficionado, y con doce años decidió dar un paso más allá e inscribirse en la Escuela Taurina de Salamanca.
Durante seis o siete años pasó de jugar al toro a aprender y formarse técnicamente en la Escuela Taurina a sabiendas de las dificultades de abrirse camino en la profesión. Vistió por primera vez de luces en Salamanca, un terno lila y oro, y tras unas sesenta tardes sin picadores debutó con los del castoreño en la localidad salmantina de Tamames, junto a Leandro Marcos y Matías Tejela.
La muleta de Julio Robles
Diego Ramos siempre se sintió muy afortunado por contar entre sus maestros con Julio Robles, quien le regaló su primera muleta. Compartió amistad con él y le brindó un novillo poco antes de morir. Buscó la suerte en el Zapato de Oro de Arnedo, siguió sumando tardes en los pueblos de Salamanca, paseando tres orejas en Oviedo en la feria de San Mateo de 2003, pero siempre sin el respaldo de alguien que apostase fuertemente por él.
Quizás por eso, nunca abandonó sus estudios y entre entrenamientos, festejos y triunfos terminó COU y se matriculó en Derecho, carrera que terminó en 2002, el mismo año que toreó la novillada de la feria de Salamanca.
La vida le llevó a trabajar en el Banco Popular, aunque su verdadera vocación siempre fue el toro. Por ello, aunque lo destinaron a Ponferrada, renunció a su puesto laboral al ser consciente de que su ubicación geográfica le apartaría del toro. Dio un vuelco radical a su situación y marchó a Sanlúcar de Barrameda.
Había bajado al municipio gaditano los inviernos de 2000 y 2001 y conocía el buen ambiente taurino que allí se vivía. «Me fui a Andalucía buscando darle a mi concepto del toreo el aire que tienen los toreros andaluces y esa gracia y empuje que han tenido todos los que han pasado por allí, como Paco Ojeda, Dávila Miura, 'El Litri', 'El Tato', Juan José Padilla o el mismo Antonio Ferrera, con el que coincidí el año que salió a hombros de Las Ventas con el toro de Carriquiri», explica Diego Ramos.
Desde que se trasladó a Andalucía, en 2004, su compromiso más importante tuvo lugar en Madrid, dos años después. Manuel Chopera le llamó para torear en Las Ventas. Aceptó aunque sabía que tenía muy pocas posibilidades de triunfar. «Había entrenado mucho, estaba muy fuerte, pero la preparación real te la da el toro. Tendría que haber matado muchos astados a puerta cerrada para estar al cien por cien y no fue así. Fui a Madrid y me estrellé contra un muro de hormigón», recuerda el salmantino.
Después de esa tarde se desanimó, pues comprendió que el triunfo no dependía únicamente de tener cualidades, sino de contar con ayudas y que echase una mano la suerte. A pesar de la desilusión, comprendió que había vida más allá del toro y se inició como empresario en un negocio de distribución de productos de cerdo ibérico por la provincia de Cádiz.
Han pasado ocho años desde que llegó a Sanlúcar y ahora, además de su empresa, está casado y tiene una niña de 15 meses. Espera su segunda hija para febrero. Una vida totalmente normal de la que jamás ha apartado al toro.
Y es que, Diego Ramos nunca dejó de entrenar, de tentar y torear. Lo más importante: siempre se sintió torero. «Soy una persona luchadora, que tiene mucho amor propio, y cuando me marco un objetivo trato de alcanzarlo aunque me lleve mucho tiempo. Mi objetivo era ser matador de toros y el sábado lo voy a conseguir», añade.
Higuera la Real será el escenario de su alternativa. Un doctorado que contará con Antonio Ferrera como padrino y Ambel Posada como testigo. Admira profundamente a ambos diestros y se siente orgulloso de estar anunciado en una localidad tan taurina y con una gran afición.
Una alternativa que se gestó este invierno, cuando se iniciaron las conversaciones en Higuera la Real. Empezó entonces a prepararse intensamente, tanto física como taurinamente, perdiendo once kilos y matando más de una veintena de toros a puerta cerrada. Se siente preparado y espera no ponerse nervioso. Sabe que es un día muy especial, algo soñado y perseguido. «Espero que los sentimientos no afloren, que me mantenga frío, porque el toro no entiende de sentimientos. Quiero estar seguro y preparado», expone el toricantano, que visitó esta semana Badajoz para presentar los carteles de la cita.
¿Y qué pasará a partir del día siguiente a la alternativa?. Diego Ramos, responde, con la firmeza que transmite a través de sus palabras. «¿Al día siguiente? Pues a seguir en el negocio de las carnes y embutidos ibéricos. Seré mucho más feliz siendo matador de toros. No voy a ir por la calle enseñando el carnet, es algo personal, pero sabré que lo tengo. Y, a partir de ahí... Lo que me depare el futuro».
Un futuro en que tan solo una cosa está clara: que no va a dejar de torear. Lo hará siempre, como lo lleva haciendo desde que comenzó a familiarizarse con los trastos jugando al toro. Porque es torero, se dedique al negocio de las carnes o a la abogacía. Siempre será torero. Y a partir del sábado, matador de toros.
Suerte, torero, etc.
TÍTULO: EL INAGOTABLE FILÓN DEL ¡ PHONE:
Apple se ciñó hoy al guión para presentar el iPhone 5, un dispositivo del que se esperaban milagros y que
... El inagotable filón del iPhone.
Los Ángeles (EE.UU.), 12 sep (EFE).- Apple se ciñó hoy al guión para presentar el iPhone 5, un dispositivo del que se esperaban milagros y que tras muchos rumores, la realidad ha puesto en su sitio como un teléfono muy competitivo pero poco innovador en un mercado liderado por Android.
El nuevo iPhone supone una "mejora sustancial" respecto a su predecesor, el modelo 4S, según la publicación MarketWatch del grupo The Wall Street Journal, y los medios tecnológicos especializados coincidieron en resaltar que se trataba de un buen aparato que deparará pingües beneficios a Apple.
El teléfono, que saldrá a la venta el 21 de septiembre en EE.UU., es más alargado para dar cabida a una pantalla de 4 pulgadas, frente a las 3,5 del iPhone 4S, incluye conexión a internet LTE (lo que algunas compañías han venido a llamar 4G), es un 18 % más fino y un 20 % más ligero.
En definitiva, un dispositivo que tras cinco años de vida ha dado un estirón y ha perdido peso sin coste adicional (199 dólares su versión más barata) pero que, lejos de proponer algo realmente novedoso, se ha contentado con adoptar algunas características y tecnologías que sus competidores ya ofrecen a los consumidores.
Desde la web CNET, que organizó un debate para seguir el evento de Apple, se destacó el hecho de que el iPhone 5 no ha resuelto la cuestión sobre cuál es el mejor teléfono de alta gama del mercado, donde sus fuerzas estarán muy igualadas con los nuevos Windows Phone de Nokia o los Samsung Galaxy.
"Por primera vez Apple no destaca como líder claro", indicó Roger Cheng en un artículo para ese mismo portal donde el analista de Ovum Adam Leach señaló que "sin la continua innovación" Apple "se arriesga a perder su atractivo ante el consumidor".
Comparado con el Samsung Galaxy S III y el anunciado Nokia Lumia 920, el iPhone 5 ofrece una pantalla más pequeña aunque con mayor resolución, es más esbelto y ligero, cuenta con una duración estimada de batería y resolución de cámara similar pero no con puerto USB.
Los tres teléfonos son compatibles con redes LTE (4G) pero el iPhone 5 carece de la tecnología Near Field Communication (NFC), un sistema de alta frecuencia que permite compartir datos entre dispositivos cuando están próximos que sí incorporan sus rivales de Samsung y Nokia.
Con motivo del debut del nuevo teléfono, Apple anunció descuentos para sus iPhone 4 y 4S, éste último pasaría a costar 99 dólares lo que para analistas como Eddie Hold, de la compañía de investigación de mercado NPD Group, es "un buen negocio" para el consumidor.
El iPhone 4S tiene solo un año de vida, incluye el asistente de voz Siri y será compatible con el sistema operativo iOS 6 con el que va equipado el iPhone 5.
Más allá del producto en sí mismo, Apple confirmó un cambio de rumbo en la forma de realizar sus presentaciones.
El difunto Steve Jobs acostumbraba a guardarse un as en la manga en sus eventos que iban de menos a más con la intención de crear expectativa.
Tim Cook, el sustituto de Jobs, cambió ese orden y Apple dedicó la primera hora de su acto a hablar del iPhone 5, la segunda hora se centró en la música, nuevos iPods y nuevo iTunes para terminar con 10 minutos de concierto de mano de Foo Fighters.
No solo no hubo sorpresas, tampoco se buscaron.
"Parece que Apple ha perdido algo de la magia que antes extasió a la mayoría de los miembros de los medios de comunicación", aseguró Jason Mick desde DailyTech.
Otros aseguraron que "Apple se había convertido en algo aburrido" y "una compañía más del sector". En Twitter muchos se acordaron hoy de Steve Jobs.
Los nuevos iPods de la empresa de la manzana mordida fueron recibidos con cierto escepticismo, en especial el iPod Touch que se venderá con el mismo precio que el iPhone 5 pero con menos prestaciones e incorpora una correa, o el nuevo iPod Nano cuyo diseño recordó a dispositivos de Nokia y Sony.
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