TODO CURSO ES BUENO Y MÁS CREAR UNA EMPRESA:/ENAMORADA DE EXTREMADURA Una ciudad enamorada del cine.

TÍTULO: TODO CURSO ES BUENO Y MÁS CREAR UNA EMPRESA:

Ángel Sánchez, natural de Torrecilla de la Tiesa, comenzó, desde muy joven, en el mundo de la construcción con la empresa familiar. Ahora y .

Está en el curso 'Incorporación a la empresa agraria', con la intención de montar una granja de pollos.

Ángel Sánchez Promotor de una granja avícola.

Ángel Sánchez, natural de Torrecilla de la Tiesa, comenzó, desde muy joven, en el mundo de la construcción con la empresa familiar. Ahora y, debido a la crisis del ladrillo, quiere abrirse camino en un nuevo campo, como es el mundo animal. Desde primavera está realizando todos los trámites necesarios para poner en marcha una granja de pollos de carne. Después de hacer «mucho papeleo», ahora forma parte del curso de 'Incorporación a la empresa agraria', impartido por APAG-ASAJA. Se trata de un trámite necesario para optar a las ayudas para la creación de un negocio de este tipo. Esta formación está compuesta por 80 horas y durará hasta mediados de noviembre. «Todo curso es bueno y más aún, para crear una empresa», detalla.

-¿Por qué se decidió por un negocio de este tipo?

-Una de las razones es porque la construcción vive un mal momento. Somos muchas personas dedicadas a este sector y sin embargo, salen pocas obras, ni siquiera de reforma. Ante este hecho, hablé con un amigo que se dedica a la cría de pollos. Mi sorpresa fue cuando me contó que, a pesar de los tiempos que corren, iba a montar otra granja. A partir de ahí, con la ayuda de mi familia, me decidí a comenzar los trámites para crear esta empresa ganadera.

-Por tanto, ¿Fue una decisión de un día para otro?

-No. Para nada. En primer lugar fui a ver cómo funcionaba todo y me informé de los pasos que hay que seguir, así como de la posible rentabilidad. Al estudiar el negocio, me di cuenta de que puede funcionar. A partir de ahí, es cierto que hay que arriesgar. El sector ganadero también está mal, pero creo que la cría de pollos puede tener salida. La carne de estos animales se consume en todas las familias. Además, peor que la construcción no creo que esté. Hace 20 años, ya, mi padre, pensó en materializar esta idea. Sin embargo, antes no te daban las facilidades como puede haber ahora y no se hizo nada.

-¿Cómo funciona?

-Lo único que se tiene que poner es la nave, que debe estar totalmente adaptada. A partir de ahí, se tiene firmado un contrato con una empresa para que te sirvan los pollos, el pienso y la medicina. Nosotros los criamos y los cuidamos para que engorden. Una vez que cojan el suficiente peso, se los llevan para carne.

-Con este sistema, lo conveniente es tener esa empresa de abastecimiento antes de montar la nave, ¿no?

-Por supuesto. De hecho yo ya lo tengo hablado. Tan solo, estoy a la espera de que las distintas administraciones me den todos los permisos para construir la nave y comenzar a trabajar. Creo que es un negocio que tiene salidas.

-¿Mucho esfuerzo económico?

-Todo cuesta mucho dinero. Hay que tener en cuenta que es una nave adaptada. Lo más caro será la luz. La primera inversión irá a parar a la edificación de esa nave y llevar la luz a estas dependencias. A partir de ahí, habrá que hacer pagos importantes todos los meses, puesto que la luz se utiliza casi todo el día. Hay que mantener una temperatura idónea y disponer de una iluminación estable casi todo el día. La intención es que coman cuanto más mejor para que engorden de una forma rápida y se los lleven. Confío en que no haya problemas con los bancos para la financiación.

-¿Y el esfuerzo físico?

-Se necesitan muchas atenciones. Uno tiene que pasarse por la granja dos o tres veces al día, sobre todo, cuando son los pollos muy pequeñitos. Hay que estar atentos para que todos coman, tengan agua y posean una temperatura idónea. Sin embargo, el ejercicio físico no es muy costoso.

-Por ahora, ¿lo peor?

-Eso está muy claro. Hay que hacer muchos trámites y mucho papeleo. Esto conlleva a que se dedique mucho tiempo a este trabajo. Se debería reducir de algún modo.

TÍTULO: ENAMORADA DE EXTREMADURA:

Una ciudad enamorada del cine.

Aunque Almodóvar ha rechazado rodar en el San Antonio, Cáceres es la capital extremeña preferida por los grandes directores - Una ciudad enamorada del ...foto.
Aunque Almodóvar ha rechazado rodar en el San Antonio, Cáceres es la capital extremeña preferida por los grandes directores.

Cáceres es la ciudad extremeña que más ha enamorado a directores de cine de todo el mundo. Aunque con Pedro Almodóvar no ha corrido la misma suerte --el director manchego finalmente no rodará en Cáceres su última película, La mala educación --, lo cierto es que la capital cacereña ha sido escenario de numerosos montajes cinematográficos, algunos de ellos convertidos después en grandes éxitos de taquilla.
De todas las producciones rodadas en la ciudad, 1492. La conquista del paraíso fue, sin lugar a dudas, la que más entusiasmo suscitó entre los cacereños. A ella le siguen otros títulos de renombre como La lozana andaluza , La celestina , Las pícaras y, más recientemente, Amor en off o La herencia .
La llegada a Cáceres el 2 de diciembre de 1991 de Gerard Depardieu, Angela Molina, Fernando Rey, Armand Assante y el director Ridley Scott tuvo una repercusión sin precedentes en la ciudad, donde se llenaron hoteles y se contrataron a 2.000 cacereños como figurantes. Scott recreó durante 15 días en Cáceres la Granada de Cristóbal Colón, un montaje presupuestado entonces en nada menos que 4.000 millones de pesetas.
El gran espectáculo del cine volvió a convertir a Cáceres en un escenario del siglo XV donde corrían a sus anchas descubridores, herejes, inquisidores y clérigos. Durante varias semanas, la ciudad monumental fue un coto cerrado para que se hiciera realidad una fantasía. Allí se entretejió la historia de un Cristóbal Colón que encarnó a la perfección el enorme cuerpo de Gerard Depardieu.

GERARDO VERA
El otro filme que también cautivó a los cacereños fue el de La celestina de Gerardo Vera, protagonizada por Penélope Cruz, Juan Diego Boto, Maribel Verdú, Candela Peña y Terele Pávez. Desde el 12 de noviembre de 1995, y durante 15 días, la ciudad asistió a los golpes de claqueta de un rodaje que sirvió para recrear la historia de amor de Calixto y Melibea ideada por Fernando de Rojas.
La ciudad compartía con Guadalajara el mayor número de escenas de la película. La casa de Calixto, la de Melibea, un mercado medieval, una capilla... fueron algunos de los escenarios que se ambientaron en el castillo de Las Arguijuelas y en la finca La Enjarada, a las afueras de la capital. El resto de escenas se rodaron en Santa María, San Jorge y San Mateo. La celestina también dejó en Cáceres pingües beneficios, empezando por los 500 extras que fueron contratados entre más de 2.000 aspirantes.
Pero la de Gerardo Vera no ha sido la única versión de La celestina que se ha rodado en Cáceres. Ya en octubre de 1981 se grabó una serie para televisión protagonizada por Tina Sainz, Gemma Cuervo, Tony Soler y Luis Prendes. Participaron unos 500 extras y el director fue Juan Guerrero Zamora, que también quiso rodar en Garrovillas,etc.