TÍTULO: UN IMPERIO PENDIENTE DE ANDY,.
ESPN Deportes
Para mí es una final más», afirmó ayer Novak Djokovic, el número uno del mundo, que hoy (15:00, Digital +), 48 horas después de la paliza que se dio con Del Potro en la semifinal más larga de la historia en el All England Tennis Club (4 horas y 43 minutos), busca su séptimo título de «Grand Slam». Para su rival, sin embargo, no será un simple partido. No puede serlo. Las 13.500 personas que habrá en la central de Wimbledon serán sólo una representación de Gran Bretaña, que lleva 77 años esperando a que Fred Perry, el último tenista local en ganar allí, tenga sustituto. Murray rompió en parte la maldición con su oro olímpico en Londres el año pasado. Ganó en las pistas de Wimbledon, pero no ganó Wimbledon, aunque en 2012 también llegó hasta la final, en la que no pudo con Federer. Esta vez lo ve cerca y se siente preparado después de haber crecido con Ivan Lendl como entrenador. Bajo sus órdenes, conquistó el oro y después ganó su primer «Grande», el Abierto de Estados Unidos, tras haber perdido cuatro finales antes en torneos de este calibre.
La grada se volcará con él y
en ella, en el palco de Andy, estará una de las responsables de que el
sueño británico sea posible. Judy Murray, fan de Feliciano López, al que
llama «deliciano», tiene casi 60.000 seguidores en Twitter y es mucho
más que la madre del número dos del mundo. Primero fue jugadora de
tenis, luego entrenadora de sus dos hijos, Andy y Jamie, y ahora es
capitana del equipo británico de Copa Federación, el equivalente
femenino a la Copa Davis. Sus obligaciones profesionales son lo primero
y, aunque antes siempre era una incondicional en el público con los
partidos del escocés, ahora acude a ver a sus chicas primero si la cita
coincide. Pero el encuentro de hoy no se lo va a perder. Puede ser un
día histórico.
La mirada láser de su progenitora quizá podría
añadir más presión a la que ya de por sí tiene Andy, pero Judy asegura
que nunca ha sido la madre dura y exigente que pintan los medios. Es
más, siempre trató de que sus dos hijos tuvieran una vida de lo más
normal y fuesen ellos los que escogieran el camino que querían seguir.
En el caso del finalista de hoy, fue él quien le pidió a los 14 años que
le llevaran a la Academia Sánchez Casal de Barcelona para poder
entrenar más. «El tiempo en Escocia es siempre terrible y el tenis no es
precisamente un deporte mayoritario. Cuando en una de las competiciones
vio cómo otros chicos, entre ellos Rafael (Nadal), podían entrenar
todos los días y compaginar el tenis con los estudios, me llamó y me
pidió que le llevará allí. Pegaba tantos gritos que me tuve que retirar
el auricular de la oreja», explica.Ya en esas competiciones junior, Judy recuerda como anécdota que el mallorquín ya tenía sus famosos «tics». «No son cosa de ahora», asegura. A Rafa le ha visto crecer y siempre ha sido una inspiración para su hijo, que suele compartir horas de videojuegos con el español. «Mentalmente, estoy mejor que en la final de 2012», dice Murray, que ayer se entrenó, pero no habló ante los medios. Quiere enterrar el fantasma de Fred Perry, que busca descanso desde 1936, aunque Djokovic no sea el mejor rival para conseguirlo. En los enfrentamientos directos se impone el serbio por 11-7, aunque en el único precedente sobre hierba, las semifinales olímpicas del año pasado, el ganador fue el escocés.
TÍTULO; LOS PULSERAS ROJAS SE HACEN MAYORES,.
LOS PULSERAS ROJAS SE HACEN MAYORES,.
- Los «Pulseras rojas» se hacen mayores
No es triste morir, lo que es triste es no vivir intensamente». Ésta es una de las frases que el creador de «Pulseras rojas», Albert Espinosa, ...«No es triste morir, lo que es triste es no vivir intensamente». Ésta es una de las frases que el creador de «Pulseras rojas», Albert Espinosa, recoge en su blog, y una que bien podría definir la serie, en la que los protagonistas narran capítulo a capítulo las vivencias de Espinosa en el hospital durante diez años. Ahora Antena 3 estrena –el lunes en «prime time»– la segunda temporada del exitoso drama médico «Pulseras rojas», que cerró su primera temporada con una media de 2,3 millones de espectadores y un 15,2% de «share». «Han pasado dos años para que se convirtieran en adolescentes», apunta Albert Espinosa, el creador de la serie, por lo que en esta nueva tanda de capítulos los pulseras rojas cambian de escenario, «de la planta de niños del hospital a la de adultos», en la que aparte del cáncer tendrán que convivir con otras enfermedades. Sin embargo, la esencia es la misma, una serie en la que se mezclan las emociones con la «valentía de los que siguen luchando», aunque Espinosa reconoce que ahora «todo es más duro, porque llevan más tiempo y las posibilidades de vivir son menores». En cuanto al reparto, una de las incorporaciones más destacada es la de Laia Costa, que dará vida a Rym, a la que el creador de la ficción define como «el álter ego femenino de Álex Monner (Lléo)», y de la que reconoce que es el nuevo personaje «que más ha gustado en TV3». Además, la segunda temporada de «Pulseras rojas» contará con la participación del veterano actor Lluís Homar. En cuanto a una tercera temporada, asegura que «la idea es que los actores crezcan, unos tres años, para que sean adultos», lo que les permitiría «vivir sus veranos, porque les hemos quitado muchos de grabación», asegura Espinosa.Spielberg tiene los derechos
«Los más pequeños han crecido a la vez que los personajes y los adultos ven cómo se crea el carácter de las personas en los hospitales», comenta Albert Espinosa sobre el nuevo punto de enganche de los seguidores de «Pulseras rojas», algo que parece que ha surtido efecto en Cataluña, ya que la serie –que se emite en TV3– obtuvo una media de 20,6% de «share» y 664.000 espectadores, 4,5 puntos más que en su primera entrega.
Otro de los mayores éxitos que ha cosechado «Pulseras rojas» es haber llegado a diferentes países del mundo. Así, ya ha sido emitida en la cadena mexicana TV Azteca y en la americana VME. Por otra parte, la RAI italiana, la YLE finlandesa o el canal 23 de Francia han adquirido también el formato. Pero lo más sorprendente es que un director de la talla de Steven Spielberg y una productora como Dreamworks se hayan hecho con los derechos para adaptar la historia de Albert Espinosa para la cadena ABC, que contará con la ayuda de la creadora de «Friends», Marta Kauffman. Sobre ello, Espinosa, que en dos meses viajará a Estados Unidos para presenciar la grabación del episodio piloto, reconoce que «cuando está detrás Spielberg todo te cambia», de manera que si «se emite en inglés en todos los países del mundo».
Sin embargo, el mayor logro de la serie que emite Antena 3 ha ido más allá de los meros datos de audiencia. El creador reconoce que, con ella, lo que «quería era que los chicos que están en el hospital tuvieran sus héroes». Además, reconoce orgulloso que «han subido en un 40% las visitas a los hospitales infantiles», y que numerosos jovenes que están viviendo una situación similar a la que Espinosa pasó le «escriben mucho».
«Cápsulas de vida» con Albert Espinosa
El creador de «Pulseras rojas» (en la imagen) contará con su propio espacio en la aplicación para móviles y tabletas, Atresmedia Conecta, que ofrecerá a los usuarios «Cápsulas de vida», unos vídeos en los que el propio Espinosa dará apuntes personales y lecciones que extrae en cada capítulo de esta segunda temporada. Además, Espinosa retoma su blog, donde los seguidores podrán encontrar secretos y detalles de la nueva entrega y fotografías exclusivas de los actores durante la grabación.
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