Fue
la guapa oficial de este país. Lo dice el título de Miss España que
ganó Verónica Hidalgo (Gerona, 1981) en 2005, y que le sirvió para ...
A QUEMARROPA
Verónica Higalgo: «Los fines de semana me pongo como Falete»
A la ganadora de '¡Mira quién
salta!' le encantaría presentar un programa infantil y dice que hace dos
horas diarias de gimnasio para «fortalecer músculo y poder vestir sin
sujetador»
Fue la guapa oficial de este país. Lo dice el título de
Miss España que ganó Verónica Hidalgo (Gerona, 1981) en 2005, y que le
sirvió para despejar el camino hacia otras aventuras televisivas: islas
desiertas y trampolines de varios metros donde ha arrasado a sus rivales
(y amigos).
- Ronda los 10.000 seguidores en Twitter. ¿No son pocos para una exmiss España y la ganadora de '¡Mira quién salta!'?
- ¡Pues sí que me parecen pocos! Pero también es verdad que
llevo poco con Twitter. En los dos meses que duró el concurso, subí de
400 a 9.000. No está mal. ¡Pero debería tener muchos más! ¡Me encantaría
llegar a los 100.000!
- ¿Cómo es que no se aseguró esas piernas de metro quince que luce?
- ¡Lo pensé! Pero bueno, más en broma que otra cosa...
- Y además nunca se pone medias... ¿Por qué?
- Me agobian. Es más por comodidad que por otra cosa. Y
siempre que puedo, voy sin sujetador. Cuanto más cómoda y más suelta,
mejor. Para eso voy dos horas diarias al gimnasio. Me sirve para
fortalecer músculos y poder vestir sin sujetador (risas).
- ¿Quién es un modelo a seguir?
- ¡Uy! Angelina Jolie. La admiro mucho.
- ¿Tiene mitos eróticos?
- Siempre me ha gustado mucho Brad Pitt. ¡Él y Angelina hacen la pareja ideal!
- ¿Usted también es de las de tener seis hijos y cuatro de ellos adoptados?
- No, no... yo me conformaba con dos... (risas).
- ¿Le entra la vena maternal?
- Casi desde que tengo uso de razón ¡Desde que tenía 20 años!
- ¿Y qué ha pasado? ¿No ha conocido varón?
- No he tenido la oportunidad... Prefiero aprovechar mi
juventud, sacarle provecho a mi trabajo y a todo esto... Lo que tenga
que venir, vendrá.
- ¿Qué le ha pasado al concurso de Miss España?
- Pues no lo sé, es una pena. La gente ha dejado de creer.
- Estuvo en una isla desierta gracias a 'Supervivientes'.
Si volviera, y con la experiencia, ¿qué tres cosas se llevaría en la
mochila?
- ¡Uf! ¡Una almohada! La pedí para llevármela al concurso, pero no me dejaron. También una caña de pescar y crema solar.
- ¿Un corrupto de cabecera?
- Si tengo que elegir, me quedo con Julián Muñoz.
- ¿Qué no perdona en verano?
- Un fin de semana en Ibiza. Playa, relax y comer bien. ¡Me encanta la paella!
- ¿Qué es Verónica Hidalgo y no lo parece?
- Doy la impresión de tener carácter y ser muy seria, pero soy muy divertida y muy bromista.
- ¿Qué le indigna?
- La impuntualidad... (Piensa) ¡Y también que se me duerman las piernas! (Risas). Sé que es una gilipollez, pero es así...
- Dijo en una ocasión que llevaba toda la vida a dieta... ¿Eso cómo se come?
- Entré en el mundo de la moda con 14 años y la agencia me
dijo que tenía que mantener una dieta. A partir de ahí empecé a comer
muy sano y ya me acostumbré. Pero matizo: hago dieta de lunes a viernes.
¡Los fines de semana me pongo como Falete! Pizzas, hamburguesas,
tartas... No me corto.
- ¿Qué película le gustaría protagonizar?
- Siempre he dicho que me gustaría ser una chica Almodóvar.
Me encantaría trabajar con él. Pero si tengo que elegir un papel... El
de Kate Winslet en 'Titanic'.
- No me lo diga... Y que Leonardo Di Caprio le agarrara por detrás en la proa...
- (Risas) ¡Por supuesto!
- Oiga, una duda: ¿el pinchazo del ladrillo también ha supuesto un descenso en el número de piropos que salen desde las obras?
- Hombre, pues sí, sí que se nota la caída (risas). ¡No me había fijado!
- ¿Le han soltado muchas burradas por la calle?
- Sí, auténticas barbaridades. Pero me ha dado por reír, más que otra cosa. ¡Qué vergüenza!
- ¿Qué quería ser de pequeña?
- Modelo y también bailarina. Me pasaba la vida bailando.
- ¿Y qué quiere ser de mayor?
- Me encantaría ser presentadora de televisión. Hacer un programa para niños.
- Y llevar como invitados estrella a los de Angelina Jolie...
- ¡Por ejemplo!
- ¿A qué le tiene miedo?
- A la muerte.
- ¿Por qué (o quién) daría la vida?
- Por mi familia.
TÍTULO; CONTADOR PONE FROOME A LIMITE,.
CONTADOR PONE FROOME A LIMITE,.
Europa Press
Contador pone a Froome al límite
Las curvas que conforman la bajada del puerto de La Rochette están en la historia del Tour desde que Joseba Beloki se cayese en una de ...
Las curvas que conforman la bajada del puerto de La
Rochette están en la historia del Tour desde que Joseba Beloki se cayese
en una de ellas el 14 de julio de 2003. El puerto de Manse, que conduce
en uno de sus descensos a ese lugar, ya había visto a Contador
pegándose con Andy Schleck hace unos años en la subida.
Contador se enloqueció en la parte final de una etapa
protagonizada por una escapada de 26 corredores, de la que salió el
ganador, el portugués Rui Costa, que conseguía su segunda victoria en el
Tour. La primera la logró en 2012. Entre otros, iban en esa escapada
Dani Navarro, Mikel Astarloza, De Gendt, Voeckler, Kloden, Peter Velits o
Hoogerland.
Con la etapa decidida, subiendo Manse, fue el Katusha, con
Losada, Dani Moreno y Purito Rodríguez, el que comenzó a acelerar la
carrera. Sky vigilaba. Se hizo una selección de forma muy rápida. Froome
se quedó con Richie Porte, Quintana, Purito, Kreuziger, Valverde,
Mollema y Contador, que comenzaría un hostigamiento que no se acabaría
hasta que sufrió esa caída.
Se levantó muy rápido. Esa forma de bajar le llevaría a
Froome a salirse de la carretera, a rodar por la hierba, desequilibrarse
y hacer gestos de reprobación con la cabeza hacia Contador. Le atacó
hasta en tres ocasiones. Kreuziger cogió la cabeza del grupo. Froome y
Porte controlaron sin problemas esos ataques. Se quedó el australiano,
que volvería a enlazar más tarde. Contador seguiría acelerando en la
bajada, curva a curva, arriesgando en exceso, buscando cortar a Froome,
que realizó en dos ocasiones maniobras extrañas con su bicicleta.
Finalmente, Porte, a falta de tres kilómetros para la
llegada, le metió delante, a Froome y a Contador, que cuando pasó al
lado de Nairo Quintana, le levantó el dedo pulgar, como diciéndole, «muy
bien, muy bien». El colombiano explicaría que «no sé por que lo ha
hecho. He bajado normal». Contador había dicho que los Movistar habían
acelerado.
Nairo le contestó: «Es falso. Íbamos al mismo ritmo para
sacar tiempo a Ten Dam. Le pido disculpas si está enfadado por eso».
Finalmente, Ten Dam perdió un minuto, se restableció el orden y ese
grupo de ocho ciclistas llegaría junto a la meta. Froome ya sabe lo que
le va a esperar en bajadas como la de Alpe D´Huez o La Madeleine.
Si Contador no puede con él subiendo, le atacará bajando,
con una presión que no le gusta nada al sudafricano, que al igual que
Wiggins tiene problemas en los descensos. Y si a este Tour le quedan
subidas, al menos tiene otros tantos kilómetros de bajadas.
Movistar conseguía la etapa que buscaba y lo hizo con Rui
Costa, que ya había ganado en 2011, el día que finalizó en Super Besse,
que resultó especial para su equipo, en un año marcador la muerte de
Xavi Tondo y los accidentes de Rubén Plaza y Mauricio Soler.
En su primer triunfo estuvo escapado 183 kilómetros, de los
189 que tuvo la etapa. Este martes lo hizo en la ascensión final,
sacando 50 segundos en el alto a sus perseguidores y manteniendo esa
ventaja en la bajada, gestionándola con eficacia.
Costa tiene 26 años. Debutó en el mundo profesional con el
Benfica, en 2007. Tuvo un problema en un control antidopaje. Dio
positivo con metilhexaneamina en el campeonato portugués contrarreloj.
Es un estimulante que la AMA había incluido en su lista en enero de
2010. Demostró que fue a causa de un suplemento alimenticio a base de
arginina, contaminado, que comieron. Le sancionaron, a él y a su hermano
Mario, que corría en el Barbot, y ganó ese campeonato, con cinco meses
de sanción, que cumplió.
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