jueves, 25 de julio de 2013

SHAILA, EN VIAS DE EXTINCION,./ A QUEMARROPA Luján Argüelles «La vida sin sexo es un aburrimiento con todas las mayúsculas .

TÍTULO; SHAILA, EN VIAS DE EXTINCION,.


 SHAILA, EN VIAS DE EXTINCION,.

Diario Femenino
  1. Shaila, en vías de extinción


    Ya tenemos la radiografía del verano: Shaila Dúrcal. La revista 'Lecturas' publica esta semana unas fotos de la cantante en una playa de ...
Ya tenemos la radiografía del verano: Shaila Dúrcal. La revista 'Lecturas' publica esta semana unas fotos de la cantante en una playa de Miami donde se la ve (después de mirarla dos veces) delgadísima no, esquelética... Tampoco. Peor aún. Porque eso más que estar delgada es estar en vías de extinción. ¿Quiere desaparecer Shaila Dúrcal? ¿Está haciendo oposiciones a mujer invisible? Al verla en esas imágenes se diría que sí. Sin embargo, su intención, según parece, es la contraria. Ella lo que desea es hacerse notar y admirar más que nunca; conseguir ese tipazo con el que por lo visto siempre soñó, sentirse delgada... «Papá, ahora me llaman la flaca», le ha comentado a Junior alborozada. Sin embargo, no hay motivo de alborozo. Basta contemplarla para concluir que en el empeño de perder unos kilitos la hija menor de Marieta se ha pasado con la dieta.
Conocí a Shaila en persona hará unos cinco años. Y me impactó por su simpática espontaneidad y porque al natural todavía es (o era) mil veces más guapa que en foto: de una belleza inocente y magnética, con unos enormes ojos color miel realmente deslumbrantes. No me pareció delgada ni gorda, sino simplemente un bellezón que había heredado lo mejor de la genética materna y paterna. Ahora viendo esas fotos ni la reconozco. Es como si el hambre se hubiera comido su cara y parte de su cuerpo... Y vuelvo a preguntarme en qué momento y quién nos hizo creer a las mujeres que estar esquelética es sinónimo de estar guapa. En México, país adoptivo de Shaila Dúrcal, son muy de reírse hasta de su sombra y allí a la muerte, por no llamarla calavera, la denominan Catrina. A ese coqueto esqueleto lo adornan los mexicanos con pamela, collares, volantes o floripondios. Y está elegantísima, sí, pero no deja de ser la muerte.
Shaila ya confesó hace cosa de un año en la misma revista que empezaba a tener trastornos alimentarios. Y se ve que en lugar de corregirlos los ha aumentado. Su imagen actual se debe, dicen, a una combinación de dieta estricta y rigurosa tabla de ejercicios (a ciertos entrenadores personales les tengo yo más miedo que a los sacamuelas de cuando no había anestesia). Cuentan que a Shaila se la ha visto imparable en la playa, venga a jugar a las palas, pero es que la hiperactividad es uno de los rasgos característicos de la anorexia. La cantante ha intentado tranquilizar a su padre explicándole que está en manos de nutricionistas y rigurosos preparadores físicos (peor me lo pone). Porque sí, también consultan a los mejores especialistas las estrellonas de Hollywood y muchas de ellas se han acabado pasado a la Paleodieta o Dieta Paleo, absurdo régimen consistente en comer lo que comían en el Paleolítico, una época en la que la humanidad era tan tonta que ni conocía la agricultura ni había inventado lo que a mi modo de ver es (junto con el perro y el jamón) el mejor amigo del hombre: ¡El pan! Uma Thurman, Beyoncé y Natalie Portman, entre otras, han vuelto a las cavernas gastronómicamente hablando por seguir la Dieta Paleo. Allá ellas. Personalmente, ahora mismo preferiría la 'Dieta Pareo'; esa que consiste en ponerse el pareo y dirigirse al chiringuito a por una cervecita y un bocata. ¡Salud!


TÍTULO; A QUEMARROPA Luján Argüelles «La vida sin sexo es un aburrimiento con todas las mayúsculas .

 - No se imagina la vida sin amor Luján Argüelles (Salas, Asturias, 1977) porque, para esta comunicadora de raza, «el amor es lo más ...
«La vida sin sexo es un aburrimiento con todas las mayúsculas» 

Gente

«La vida sin sexo es un aburrimiento con todas las mayúsculas»

Quiere parecerse a su abuela, que era «moderna, valiente y feliz». Prefiere «granjeros antes que príncipes» y le da vergüenza tocar el piano delante de sus amigos

No se imagina la vida sin amor Luján Argüelles (Salas, Asturias, 1977) porque, para esta comunicadora de raza, «el amor es lo más importante».
- ¡Preséntese!
- Soy Luján Argüelles, una joven aunque cada vez menos joven (risas) asturiana que disfruta un montón con el mundo de la comunicación, con mis amigos y con mi familia. ¡Soy muy básica!
- Su nombre no lo es tanto...
- Luján es argentino. La hermana de mi padre emigró allí y en Argentina la Virgen de Luján es como aquí la Virgen del Pilar.
- Hizo Historia y también estudió piano. ¿Deleita a sus amigos con conciertos caseros?
- ¡Me da mucha vergüenza! Soy un poco puntillosa, y saber que con 18 años daba conciertos en el (Teatro) Campoamor y que ahora soy una zote... ¡Pues no me gusta! Eso sí, me encantaría que mis hijos hicieran piano, aunque no por obligación. Te abre la mente. Ayuda a desarrollar la cabeza. Por mi parte, a ver si me pongo otra vez, siento cierta frustración.
- ¿En cuál de sus concursos le hubiera gustado participar?
- (Con decisión) ¡En 'Password'! ¡Tenía el juego de mesa y me pulía a mis amigos!
- 'Granjero busca esposa', 'Un príncipe para Corina', '¿Quién quiere casarse con mi hijo?'... ¡Está hecha usted una celestina!
- Me encanta. Me encanta ver a la gente que se enamora, las comedias románticas...
- ¿Qué no es Luján Argüelles?
- Falsa.
- Entre príncipes y granjeros... ¿Con qué se queda?
- Pues hombre, tengo más afinidad con los granjeros porque yo soy de un pueblo. A mis 36, los chavales de Corina son muy jóvenes...
- ¿Qué es una vida sin amor?
- No me imagino ninguna vida sin amor, hay muchos tipos de amor. Pero sería una vida muy triste. El amor es lo más importante.
- ¿Y sin sexo?
- ¡¡¡Un aburrimiento!!! Con todas las mayúsculas y luces de neón.
- ¿Tele es igual a caja tonta?
- No. En televisión se pueden hacer cosas chulísimas, como 'Callejeros', 'Diario D'... La tele tiene de todo.
-¿Qué recortaría de la tele?
- Llevo muy poco en televisión como para opinar sobre recortes... Se lo dejo a los programadores.
- ¿Y de la sociedad?
- La falta de solidaridad.
- Además de fabes y sidrina, como buena asturiana, ¿qué más vitaminas le hacen falta?
- Un buen jamón, una buena tortilla... ¡Me lo como todo! Y no hago dietas. Pero ni dietas ni deporte, aunque sea consciente de lo bueno que es eso...
- ¿De quién aprende?
- De todo el mundo. Es bueno pensar que no tienes la razón. Y aunque la tengas, escuchar para ver si puedes mejorar.
- ¿Qué le hace perder la cabeza?
- Una noche interesante.
- ¿Y qué le interesa de la noche?
- Un señor interesante. Y como soy muy fiel, ya se sabe el señor.
- Ni champán, ni orilla del mar...
- ¡No, no, no! Con el señor es suficiente (risas).
- ¿A quién desahuciamos del país?
- (Risa pícara) La lista es larga...
- Si fuera presidenta, ¿cuál sería su primera medida?
- No tengo ni idea. Es más inteligente confiar en lo que tenemos y pedirle que ponga todas sus fuerzas en solucionar la situación.
- No sale de casa sin...
- ¡Sin tacones! ¡Aunque ahora me he comprado mis primeras bailarinas! (Risas)
- ¿Cuántos tacones tiene?
- ¡Buf! Tengo muchísimos, me encantan. Pero no, no los tengo contados porque me daría vergüenza.
- Elija pandilla de famosos para irse a la playa.
- Con las 'cracks' Lorena Castell y Leire, de La Oreja de Van Gogh.
- ¿A qué ha renunciado?
- Hasta ahora, a tener un hijo. He estado demasiado volcada en mi trabajo, pero no quiero renunciar para siempre.
- ¿Qué echa de menos?
- A 'mamina'. A mi abuela, que murió el año pasado.
- ¿Qué le dejó sin habla?
- La primera vez que Carlos Herrera me dijo que si quería sustituirle. Lo recuerdo todo, hasta lo que llevaba puesto. Me quedé en 'shock'. ¡Si no sabía nada de política!
- ¿Cuándo quiso salir corriendo?
- En 'Password' había algunos famosos que daban algunas respuestas... Uno dijo 'coño' cuando era Logroño...
- ¿Con quién le sacan parecido?
- Con Marisol.
- ¿A quién quiere parecerse?
- A mi abuela. A cómo entendió y vivió la vida.
- ¿Cómo era ella?
- Fue muy feliz, muy valiente y muy moderna. Yo quiero ser así.

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