Campo Adentro, plástica social.
– La
realidad se impone, asistimos a una quiebra del modelo de desarrollo en
el que cambian los paradigmas establecidos y aparecen nuevos ...
La realidad se impone, asistimos a una quiebra del modelo de desarrollo
en el que cambian los paradigmas establecidos y aparecen nuevos
escenarios. Es precisamente en este momento crítico que atraviesan
nuestras sociedades cuando parece más relevante prestar atención a
fórmulas que han funcionado hasta hace poco, como el campo y los
llamados mercados locales, que han mantenido una evolución sostenible
con el medio para generar riquezas. Esto lo ha entendido muy bien el
artista Fernando García Dory, ideólogo de Campo Adentro, que desde sus
inicios en 2010 plantea la posibilidad de un futuro en el que arte,
agriculturas y medio rural se reencuentren y propongan una alternativa
de vida a la actual crisis. Todo a partir de esta obligada simbiosis, de
gran capacidad regenerativa, máxime si se realiza desde una dimensión
europea.
En resumidas cuentas.
A
tenor de lo escrito en los vinilos, el coleccionista Gilbert Brownstone
es un tipo generoso. «Nunca tuve el deseo de poseer o retener de ...
A tenor de lo escrito en los vinilos, el coleccionista
Gilbert Brownstone es un tipo generoso. «Nunca tuve el deseo de poseer o
retener de manera permanente muchas obras de arte, mi conducta frente
al arte es la misma que con los seres humanos. Convivo con algunas obras
porque soy amante de la belleza de las formas elevadas por el
pensamiento. Adquirí la mayoría de estas piezas durante mis años de
estudiantes de Historia del Arte en París y como curador y director de
museos y galerías. Por tanto la donación para mí tiene el valor de estar
compartiendo mi historia de aprendizaje y de trabajo». Y también un
inconformista, pues se sabe que robó de una galería parisina una obra de
Michaux para demostrar la hipocresía que mueve al mercado del arte; al
fin y al cabo para la policía lo robado no tenía ningún significado, no
dejaba de ser simples «garabatos».
Miró, Rouault, Alechinsky, Erró, Lindner, Kienholz. Ahora
pueden disfrutar en la Fundación Mercedes Calles-Carlos Ballesteros de
Cáceres de una selección de obras donadas por Brownstone al Museo
Nacional de Bellas Artes de La Habana, cuyo interés radica, a mi modo de
ver, en que cada una de las obras -un total de 57 litografias- refleja
por sí sola los ismos más importantes del XX, fruto de la amistad de
Gilbert Brownstone con muchos de estos artistas. Así Vuillard
/Simbolismo, Masson/Surrealismo, Warhol y Lichtenstein/Pop,
Duchamp/Dadaísmo, Albers/Abstracción geométrica.
Por otro lado está el caso Picasso, animal artístico donde
los haya, con la planta superior toda para él, y donde «juega» con una
serie de retratos imaginarios. Puro divertimento. En otra sala sin
embargo, nos enfrentamos a un Picasso más elaborado, con la serie Faunes
et Flore d'Antibes, en donde no faltan ejemplos de traza decidida y
voluntariamente infantil, como la litografía firmada el 30.9.59.
Y todo en el contexto de unos espacios íntimos, los más
apropiados para este tipo de exposiciones de gabinete, para piezas
pequeño formato. Sin duda, un deleite.
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