FALCONE:/ LA CASA DE MAGDA./ EL REAL MADRID-2- CAMPEÓN DE LA SUPERCOPA DE ESPAÑA CONTRA EL BARCELONA.-1-

TÍTULO: FALCONE:

El primer gran arrepentido de la Mafia, Tommaso Buscetta, le dijo al juez Giovanni Falcone en 1984 que solo se fiaba de él: «No creo que el ...

El primer gran 'arrepentido' de la Mafia, Tommaso Buscetta, le dijo al juez Giovanni Falcone en 1984 que solo se fiaba de él: «No creo que el Estado italiano tenga realmente la intención de combatir a la Mafia». Le advirtió de que no le creerían si decía todo lo que sabía sobre la complicidad de la política, porque el país no estaba preparado. En el 'maxiproceso' a Cosa Nostra el juez se centró en la mera demostración de su existencia, que entonces ya era una revolución.

Si preguntan a un italiano quién se ajusta a su idea de héroe nacional es muy probable que responda: Giovanni Falcone. Naturalmente, cuando estaba vivo muchos lo ponían a parir. De políticos de derecha e izquierda a los desplantes del Consejo Superior de la Magistratura, que le zancadilleaba en cada promoción, o a los anónimos injuriosos del tribunal de Palermo. «No ha habido un hombre en Italia que haya acumulado más derrotas que Falcone, ni cuya confianza haya sido traicionada con más determinación y malignidad», acusó luego su amiga la fiscal Ilda Boccassini. «Siempre le jodieron y no le dieron ninguno de los puestos que merecía». Nunca nadie ha hecho autocrítica. Solo elogios del muerto.

Falcone es uno de esos italianos anómalos, que a menudo acaban muertos, en el que se identifican tantos italianos anónimos. Independiente, no alineado, no chantajeable, peligroso. Era un sabueso, un lince de las leyes, armado siempre con una sonrisa burlona. El actual fiscal nacional antimafia, Pietro Grasso, recuerda que cuando lo conoció se volcó en resolver el caso... de un ciclomotor robado. La reacción oficial tras la primera sentencia histórica del 'maxiproceso' en 1987 fue bloquear el ascenso de Falcone al puesto de jefe instructor, al jubilarse Antonino Caponetto, y colocar a un magistrado que pulverizó el trabajo del 'pool' de Palermo. «Soy un hombre muerto», dijo Falcone a sus amigos. Cada revés institucional era para Cosa Nostra un mensaje que le señalaba como víctima. Al final, en 1991 se iría a Roma a un puesto en el ministerio de Justicia, donde pudo hacer lo que no le dejaban, impulsó normas decisivas contra la Mafia, creó un FBI italiano, la DIA, y un fiscal nacional antimafia, aún vigentes.

Fue en aquel momento de máximo desprestigio, en junio de 1989, cuando Falcone sufrió un atentado frustrado que ha ido desvelando escenarios inquietantes. Estaba de vacaciones en un chalé con playa privada en Sicilia, en Addaura, y una mañana encontraron 58 cartuchos de dinamita entre las rocas, cerca de la casa. Le esperaban para cuando fuera a bañarse. Por suerte algo falló y no estallaron. Colocaron la bomba dos submarinistas que llegaron por la noche a los arrecifes desde una lancha. Esa fue la versión oficial durante veinte años, hasta que en 2010, anteayer como ven, tomó cuerpo otra más oscura. El comando que puso la bomba habría llegado por tierra el día anterior, pero con los mafiosos había agentes de los servicios secretos. ¿Y los dos submarinistas? Sí, los hubo, pero llegaron hasta la bomba por la noche y la inutilizaron. Eran también agentes secretos, pero de los buenos. En resumen, una parte mala de los servicios secretos quería liquidar a Falcone, pero otra parte buena lo salvó, al menos aquella vez.

Se cree que aquellos submarinistas eran los agentes Nino Agostino y Emanuele Piazza. Por una razón muy simple, porque a los dos se los cargaron. A Agostino, a los dos meses, con su mujer de 20 años, tras volver de la luna de miel. Luego registraron su casa y se llevaron documentos. Piazza desapareció nueve meses después. La Policía ventiló ambos casos como asuntos pasionales. De Piazza hasta dijeron que se había fugado con una amante a Túnez. Fue uno de los famosos 'depistaggi', operaciones de despiste. Años después se supo que había sido estrangulado y disuelto en ácido. También fue eliminado un delincuente común de la zona de Addaura que casualmente vio algo esa noche -se resolvió como un ajuste de cuentas entre camellos- y un confidente mafioso, Luigi Ilardo, que reveló a los Carabinieri la presencia de agentes en el lugar. Lo mataron a los pocos días de firmar su declaración.

Mentes refinadas

A Falcone hasta le acusaron de haberse organizado el atentado para darse publicidad. Pero ya entonces él intuyó por dónde iban los tiros: «Estamos ante mentes muy refinadas que intentan orientar algunas acciones de la Mafia. Quizá existen puntos de conexión entre la cúpula de Cosa Nostra y centros ocultos de poder que tienen otros intereses». Veinte días después, el fiscal todavía no le había interrogado sobre lo ocurrido. El temporizador del artefacto, decisivo para la investigación, se perdió misteriosamente. En su casa de Palermo, de cincuenta vecinos, solo uno le expresó su solidaridad. Pero se quedó muy preocupado porque la primera llamada que recibió, nada más hallarse la bomba, fue de Andreotti. «Si quieres conocer quién está detrás de un homicidio, mira quién manda la primera corona de flores», le dijo a un amigo.

Tras la sentencia del Supremo en 1992, que confirmó las históricas condenas del 'maxiproceso', Falcone esperaba su hora con una vida blindada. «Se adquiere una buena dosis de fatalismo -explicaba-. En el fondo se muere por muchos motivos, un accidente de tráfico, un cáncer, y también por ninguna razón en particular». Arrepentidos han revelado que pensaban asesinarle en Roma, donde vivía entonces. Estaba todo listo y las pistolas preparadas, pero recibieron la orden de esperar. Se haría en Palermo y a lo grande. Un cambio de última hora que ha alimentado la tesis de «mentes muy refinadas», no solo mafiosas, tras el atentado. El 23 de mayo de 1992 Falcone y su mujer fueron a Palermo. Lo decidieron en el último momento, con un vuelo de Estado. Pero alguien avisó a Cosa Nostra, que había colocado 500 kilos de explosivo bajo la autopista del aeropuerto. A las 17.56 horas el Instituto de Geofísica registró «un pequeño evento sísmico con epicentro entre Isola delle Femmine y Capaci». La muerte de Falcone, su mujer y tres escoltas dejó un cráter gigantesco, aún abierto en la democracia italiana.

TÍTULO: LA CASA DE MAGDA.

El restaurante más antiguo de Varsovia tiene un estrecho vínculo con España. Fukier está en el corazón de Stary Miasto, el centro histórico de la capital polaca, arrasado por los nazis y reconstruido tras la Segunda Guerra Mundial. Sus orígenes datan del siglo XVI-foto-: empezó siendo una tienda de vinos y hoy sirve como referencia obligada para los amantes de la cocina polaca. La dueña del local es Magda Gessler, una famosa decoradora, pintora y restauradora que vivió dieciséis años en Madrid, donde estudió Bellas Artes y empezó a hacerse un nombre entre las cazuelas. Amiga de los cocineros Ferran Adrià y Pedro Subijana y del político y diplomático Javier Solana, se ha convertido en una institución de la buena mesa polaca. Posee veinticinco restaurantes, pastelerías y otros establecimientos repartidos por todo el territorio, pero su favorito sigue siendo el Fukier: «Es el mejor restaurante de esa culinaria con un toque aristocrático que se hacía antes de la guerra en mi país y que, por desgracia, ha desaparecido», lamenta.

Esta mujer encantadora y un poco alocada, de largos cabellos rubios y rizados, es hija del periodista Miroslaw Ikonowicz, amigo del admirado reportero, historiador, escritor, ensayista y poeta Ryszard Kapuscinski. Pasó parte de su infancia en Cuba -su padre era corresponsal de la agencia polaca PAP-, y recuerda que por su casa pasaron Fidel Castro y Ernesto Che Guevara. Magda se casó en primeras nupcias con un periodista de origen alemán, se divorció en 1980 y contrajo matrimonio con Piotr Gessler, un rico empresario polaco. Años más tarde se volvió a separar y encontró el amor con un médico, pero mantuvo el apellido Gessler.

Magda presenta en la cadena privada de televisión TVN el programa de cocina más prestigioso del país, 'Kuchenne rewolucje', y cuida con esmero el Fukier, su auténtica joya: «Se trata de un sitio especial, donde se reúne la flor y nata del país para hacer negocios, pactos políticos o simplemente pasar un rato». Pero Fukier no solo es eso: la artista y empresaria, que se declara orgullosa de ser «amiga de la minoría homosexual y de la minoría judía», ha hecho grandes esfuerzos por convertir el restaurante en el lugar de encuentro gastronómico y amistoso para la gente joven del mundo del cine y la moda. «Aquí te puedes esconder, pasar desapercibido si lo deseas. Está abierto a todo el mundo y muy especialmente a las personas que aman la buena comida y el buen vino, que aman la vida».

'Bigos' y 'pierogis'

La decoración del establecimiento es otro de sus atractivos: sus cuatro salas están adornadas con numerosas velas, espejos, flores, lámparas, antigüedades y cuadros que crean un ambiente relajado. Aquí han compartido mantel personalidades políticas de todo el mundo y celebridades de muy variada naturaleza, entre las que no escasea la representación española: Bill Clinton, Henry Kissinger, Nicolas Sarkozy, Felipe González, José María Aznar, Gerhard Schröder, la Reina Sofía, Naomi Campbell, Claudia Schiffer, Woody Allen, Roman Polanski, Pedro Almodóvar.

Mientras Magda habla de su restaurante con pasión y alegría, van entrando y saliendo clientes y por las mesas desfilan platos sabrosos y abundantes en carne, como el 'kotlet schabowy', los 'bigos' (guiso tradicional de col blanca fermentada con verduras, setas, trozos de salchicha y carne ahumada) o los 'pierogis' (pequeñas empanadillas cocidas con rellenos de col agria y setas, de queso blanco y patatas o de carne de ternera), sin olvidar suculencias como las chuletas de pollo untadas con mantequilla, con relleno de setas y trocitos de pan, o el pato asado con manzanas. Va a tener razón Magda Gessler: en Fukier, los clientes aman la vida. Y, si no, es un buen lugar para aprender a amarla.

Fukier. Situado en el corazón del casco histórico de Varsovia (Plaza Rynek Starego Miasta, 27). La mayoría de los camareros atiende a los extranjeros en inglés. La dueña habla español.

Precios. Caros para una ciudad como Varsovia: 30 euros de media por persona.

TÍTULO: EL REAL MADRID-2- CAMPEÓN DE LA SUPERCOPA CONTRA EL BARCELONA.-1-

La Supercopa más vista de siempre en TV: 10,4 millones.

El Real Madrid y Barcelona se ha convertido en la Supercopa más vista de la historia de la televisión con 10,4 millones de espectadores y 61,3 por ciento de cuota de pantalla.

SUPERCOPA | REAL MADRID 2 - BARCELONA 1

Modric debutó con el Madrid: 'Mejor no puedo empezar'.

Luka Modric, flamante y de momento único fichaje del Real Madrid para la temporada 2012-13, se estrenó como jugador blanco en el minuto 83. Estuvo a punto de marcar.

Otra vez tres jugadores de nuestra Liga, Cristiano Ronaldo, Messi e Iniesta, aspiran a Mejor Jugador del Año de la UEFA.

El Madrid ganó 2-1 al Barcelona e hizo valer el goalaverage para ganar su novena Supercopa de España. Higuaín y Cristiano hicieron los dos goles blancos y Messi acortó distancias.

La segunda mitad del partido en la que hemos atacado con diez hasta el final es seguramente uno de los días en los que me pueda sentir más orgulloso desde que estoy en el Barcelona", aseguró el técnico.

Ronaldo, goleador de nuevo en un Clásico, se mostró muy feliz por el triunfo: "La verdad es que hemos entrado muy bien en el partido, hemos marcado dos goles y tuvimos mucha confianza para jugar".,etc.