Nirvana, pero sin calma

Nuestro periplo indio toca a su fin. Tardaremos ocho horas en recorrer por una autopista de peaje los 264 kilómetros que separan Jaipur de Delhi. Tras casi ser arrollados por una santísima vaca -el espejo retrovisor esquivó su oreja- paramos a almorzar en el palacio de Samode. Allí, coincidimos con Om, un guía que nos facilita su perfil de Facebook con la intención de que le gestionemos una aventura con sabor patrio. Después nos enteraremos de que está casado. ¿Qué les pasa a los indios? Jan, debemos abandonar el país antes de que sea demasiado tarde. Como curiosidad, nos cuenta que ha acompañado al exministro José Bono en las dos ocasiones que ha visitado la zona. «Es majo y muy religioso», confiesa con sacacorchos. Tranquilo, si no se lo vamos a contar a nadie.

Ahora llega la despedida. Buf! Las odio. En nuestros ocho días de viaje de novios por la India, Ashok, nuestro guía paciente de sonrisa profident, se ha convertido en un hermano hindú para el novio, que soy yo. Le hemos entrevistado hasta la saciedad y a decir verdad pienso que le conozco de puta madre. Le quiero. Hemos oído de su boca las más grandes historias. Nos ha acompañado a ver in situ la elaboración de las alfombras de cachemir. Me ha pedido que le apunte en su móvil un par de páginas porno con las que pasar un buen rato. Y hasta ha probado con nosotros la carne por primera vez. Cómo no le voy a querer. Si llego a tener más líneas, le haría el homenaje que se merece, pero, como ven, la tinta va aproximándose a la meta.

A ver, que me pongo celosa. Era muy majo sí, pero hay que ser fuertes. Dos horas y media después aterrizamos en el mini-aeropuerto de Katmandú. Krishna, de la agencia, nos recibe con collares de flores naranjas y el típico saludo. ¡Namaste!

Ahora, al lío. Jan y yo pensábamos que Nepal sería un lugar tranquilo, donde señores con gorritos de lana comen arroz en cuencos. Pero lo cierto es que no podíamos estar más equivocados. Pobreza, gentío, suciedad, niños esnifando pegamento, cableado enmarañado, calles sin asfaltar y, de nuevo, peligro en las carreteras. La gran novedad: los nepalíes piden, pero no insisten. Por lo demás, hermano gemelo de la desconcertante India. La sociedad se estructura bajo un sistema de castas, los matrimonios se conciertan, la vaca es el animal sagrado y el hinduismo también es la religión más popular. Y eso que Buda fue príncipe de una región del Sur del país. A los 26 se adentró en el bosque a meditar y fue a la edad de Cristo cuando alcanzó el Nirvana y se propuso extender su filosofía. En su momento, ganó muchos adeptos por sus ideales pacíficos y tolerantes y porque el Nirvana «te aleja de los padecimientos de esta vida». Ahora apenas el 10% de la población sigue sus preceptos.

Las drogas, prohibidas

Aquí la pobreza es extensible a casi toda la sociedad. Suponemos que habrá ricos, no los vemos. Estamos en un país discreto, exiguo. Y llama la atención su pasión por los trajes militares y las máscaras anti-polución. Katmandú me ha trasladado a otra época, otra filosofía, otro mundo. Me encanta porque soy un tipo difícil de sorprender. Los monos trepan a sus anchas por los templos y hay niñas con ropas gastadas regalando velas de la suerte a cambio de la voluntad. Hay tiendas, muchas tiendas. Y cuatro gotas, convierten las calles en un barrizal.

Las drogas están terminantemente prohibidas, veinte años a la sombra por un triste porro. Y eso que en los setenta fue colonia de los hippies, que solían apalancarse a fumar marihuana, y lo que no es marihuana, en las escalinatas de los templos de la plaza Durbar.

Hace quince años impusieron una dura legislación contra el consumo y tráfico de drogas para frenar el turismo del 'colocón'. Shah, hijo del que fuera rey hasta 2008 -ese año el país abolió la monarquía-, no debía de ser muy afín a la nueva norma. Recientemente ha sido detenido en Phuket (Thailandia) por poseer una gran cantidad de marihuana. Además, un pajarito nos ha contado que «es muy malo» y que el año pasado sufrió un infarto a causa de la cocaína. Error.

Es triste, pero el maltrato y la explotación de los niños de la calle no preocupa tanto. Entrar con el enano de la camiseta verde a uno de los ultramarinos me hizo verlo con mis propios ojos. Habíamos dado solo tres pasos cuando, sin previo aviso, pamba, tobón. Total, que tras el cara a cara con el perdonavidas del súper, hicimos la compra y añadimos al momento unas chocolatinas y un zumo. Él se había limitado a coger leche en polvo y galletas 'María' con las que alimentar a toda su familia. No es dinero. Imaginaos la cara de felicidad de un niño como si descubriera por fin que existen los Reyes Magos. Magia. Lo triste es que, como hay mucho idiota suelto, ya tuvo que venir otro julai a intentar quedarse el botín. Tras los Reyes llegó 'El Coco', pude verlo en sus ojos, y cuando nos acercamos para ver qué pasaba, de una carrera se hizo invisible. Esperamos que alcanzara su destino. Suerte, pequeño.

LOS PROTAGONISTAS

Quiénes son. Jan Echevarría y Diana Rivero se conocieron hace nueve años en la universidad mientras estudiaban Periodismo. Ahora él trabaja en Vocento y ella es profesora en la UPV. Su mayor pasión es viajar. Y después, contarlo. Lo hacen los domingos en estas páginas hasta el uno de septiembre.

TÍTULO. EL OBJETO Y YO, FRANCISCO CARRAMIÑANA, ES UNA EPOCA ACELERADA, SE HAN PERDIDO VALORES Y SE PRECISA MAYOR AUTOESTIMA.

REGIONAL

«Es una época acelerada, se han perdido valores y se precisa mayor autoestima»

«Cada día estoy más convencido de que podemos ayudar más a los pacientes enseñándoles a ser autorresponsables de su salud que con fármacos»

- Para quien no le conozca, ¿usted es.? ¿de qué trata su blog?

-Francisco Carramiñana Barrera, extremeño nacido en Zafra hace 57 años, el segundo de 9 hermanos y padre de 5 hijos. He estudiado en Fuente de Cantos, Zafra y Badajoz. Realicé la licenciatura de Medicina con la primera promoción de la Facultad de Badajoz, y a los diez días de finalizar mis estudios inicie la labor de médico en Calzadilla de los Barros, de donde guardo muy buenos recuerdos profesionales y personales; posteriormente ejercí en Zafra, donde trabajé con mucha intensidad, en ocasiones con condiciones muy adversas. Inicié mi colaboración con el Comité de los Coloquios Médicos Quirúrgicos de Zafra, también inicié la formación y actividades en diabetes, como la colaboración en los campamentos de vacaciones para niños con diabetes tipo 1. Durante esta larga etapa concluí el doctorado en Medicina sobre el Síndrome Metabólico, dirigido por el catedrático de Fisiología, Dr. José Enrique Campillo. Diversas circunstancias me llevaron a dejar Zafra para comenzar mi labor como médico en el centro de salud de San Roque en Badajoz, donde trabajo. He pertenecido a la Junta directiva del Colegio Oficial de Médicos de Badajoz desde 2005 a 2013. Colaboro activamente con la RedGdps, el grupo de trabajo de diabetes de Semergen -Sociedad española de Médicos de Atención Primaria- y la SEDI -Sociedad Extremeña de Diabetes-. Mis principales aficiones son las plantas, en especial los bonsáis de plantas autóctonas y las plantas crasas, hacer deporte (nadar, correr, andar, piragua...). Me gusta escuchar la radio y música de todo tipo, soy fan de 'Cuando los elefantes sueñan con la música' de Radio Nacional 3.

-¿De qué trata su blog?

-Elegí el nombre para tratar de dar consejos en salud, enfocado a la prevención, el autocuidado, información sobre temas básicos de interés general y responder a preguntas de los lectores.

-¿Cómo resumiría, brevemente, la época que nos toca vivir?

-Globalizada, acelerada, confusa, baja de principios, en la que se han perdido algunos valores y se precisa mayor autoestima, de la que espero salgamos con cambios profundos a nivel global.

-Será una época positiva porque...

-Salir de la crisis nos aportará soluciones creativas y conducirá a una sociedad mejor. Creo que siempre ha sido así, en las crisis previas a nivel nacional y mundial han servido para buscar alternativas, crear nuevas opciones y oportunidades que siempre han conducido a mejoras, en definitiva al progreso.

-O quizás será lo contrario porque.

-Se llevará por delante muchas cosas, puede conllevar situaciones extremas, acrecentar las diferencias sociales, el rico más rico y el pobre más pobre.

-¿Cómo saldremos de esta en Extremadura? ¿Mejores, peores, más, menos, más lejos, más cerca.?

-Tenemos muchas riquezas y recursos por explotar, y personas de mucho valor. Posiblemente los progresos serán lentos pero indudablemente avanzaremos a mejor, es la ventaja de ser una de las zonas de España más olvidadas y menos desarrolladas.

-¿Escribir el blog supone un reto, un riesgo, un placer, un dolor.? ¿Por qué?

-inicié el blog como un reto pendiente y cada día me gusta más. Pienso que como profesional debemos estar en los medios de comunicación y en las redes sociales aportando nuestro granito de arena.

-¿Y hacerlo en el HOY implica.?

-Estar más cerca de los extremeños y tener una ventana de comunicación para mejorar la salud de todos.

-¿Son muchas las veces que se muerde la lengua? ¿Con qué temas, personas o noticias de actualidad?

-No me aplico literalmente el dicho de «si me muerdo la lengua me enveneno». Claro que me gustaría decir ciertas cosas más claro, más alto y con más contundencia. Especialmente las injusticias, el maltrato o los abusos y si es a nivel profesional más. Pertenezco a Amnistía Internacional y Cruz Roja, además de colaborar con Medicus Mundi y otras ONG. Participo activamente en plataformas sociales como Avaaz o Change.org. No podría concretar en una sola o varias personas, prefiero centrar mis críticas en los políticos y los jueces, creo que deben sufrir una reforma profunda, necesitan un cambio de actitud y un giro de sus actuaciones. Otros a los que enmendaría la plana son los banqueros y los empresarios/trabajadores defraudadores. Y el tema que profesionalmente más me altera y sufro es el programa informático del SES y que se conoce con el nombre de JARA y que yo denomino 'Jara Canaya' por similitud con el programa informático de Andalucía, que nuestros compañeros llaman 'Diraya Canaya'. Impresionante lo que pacientes y profesionales sufrimos todos los días en las consultas con la utilización de la aplicación clínica de este programa, su poca operatividad, poco amigable, excesos de clips para cualquier operación, ausencia de retorno de información, falta de alarmas y esenciales como alergias o interacciones de medicamentos, la no resuelta confidencialidad de la información de los pacientes y la obligatoriedad de abrir otros programas para ver analíticas, radiologías, informes de anatomía patológica, de cardiología. o de las mamografías. Todo ello produce una pérdida de operatividad, tiempo, frustración que parece no importar a nadie, ni tener solución pues las incidencias y denuncias durante los más de 6 años de funcionamiento son a miles, a diario, a pesar de lo cual las modificaciones son mínimas.

-¿Cuáles son sus temas fetiche, aquellos por los que irremediablemente siente más atracción o interés?

-Tengo especial predilección por los temas sobre alimentación sana y los hábitos de vida saludables, en los que incluyo el sentido positivo de la vida. Cada día estoy más convencido de que podemos ayudar más a los pacientes enseñándoles a ser autorresponsables de su salud que con fármacos. Aunque todos estamos abducidos por la tecnología y los hospitales, lo más importante para nuestra salud está fuera de ellos; desde el cuidado del aire que respiramos, el agua que bebemos, cómo tratamos las basuras, la elaboración de los alimentos a la atención sanitaria en los centros de salud. En este sentido, siempre pongo el símil entre un hospital de alta tecnología en un país subdesarrollado y otro en un país del primer mundo. En el primer caso parece que el hospital puede resolver poco cuando la gente se muere de desnutrición y enfermedades infecciosas. En los países desarrollados nos morimos de sobrealimentación, enfermedades cardiovasculares, cáncer, accidentes. En ambos casos las soluciones para elevar la salud de la población están claramente fuera de los hospitales de alta tecnología. Otros temas que me interesan mucho son la inteligencia emocional, la asertividad y la risoterapia, que trato de aplicar a diario en todos los aspectos y momentos de mi vida.

-¿En quién piensa cuando escribe? ¿A qué perfil o prototipo de lector se dirige?

-Pienso en el mensaje que quiero transmitir y con el que me gustaría que se quedaran los lectores. No tengo prefijado un prototipo de lector, me imagino a cualquier persona que pudiera acudir a la consulta y siempre me esfuerzo por evitar el lenguaje médico para que una persona no sanitaria pueda entenderlo.

-¿En quién se inspira? ¿Qué escritores, blogueros o columnistas son sus referentes?

-Me inspiro en mis maestros, especialmente en el Dr. Campillo. Me encantaría decir las cosas como las cuenta Carlos Pajuelo del blog 'Escuela de padres' o la frescura de 'Solita en Cáceres', o la interesante información de 'Guiris por Extremadura'. Mis blogueros de referencia son Mateu Seguí, Salvador Casado, Esteban Jodar, el Dr. Delgado o Híbrido sanitario a quienes sigo y leo, tomo cosas de ellos y trato de adaptarlas a mi estilo.

-¿Qué se pierden los extremeños que no leen a los blogueros de HOY?

-Conocer a personas muy interesantes que conviven con nosotros y que nos dan una perspectiva de diferentes temas cercana y con la visión que podemos aportar los que vivimos en Extremadura.

-¿En verano lee más de lo habitual?

-Sí, durante el verano me dedico a la literatura que me atrae, lectura atrasada que me apasiona y que en el tiempo del curso académico no me atrevo a abordar para no engancharme a la lectura.

-¿Qué lee?

-Temas de divulgación científica, sobre psicología, sobre árboles, novelas de intriga. Leo casi todo lo que publica José E. Campillo, como el 'Elixir del fin del mundo', a Eduardo Punset, a María Dueñas, Dulce Chacón, Carmen Posadas o a Helen Fisher o a E.L. James. Suelo leer en los viajes que hago en avión y en las vacaciones de verano, casi siempre en horarios de calma buscando la tranquilidad.

-¿Estas fechas son idóneas para.?

-Para realizar actividades en familia, al aire libre en entornos de agua: natación, piragua. Viajar, relajarnos, reflexionar sobre lo que hemos hecho en este primer semestre del año y tomar fuerzas para lo que queda de año.

-El curso que viene se ha propuesto.

-A nivel profesional: incrementar la investigación, mejorar algunas técnicas (cirugía menor, ecografía,.), continuar aprendiendo y mejorando la atención a los pacientes. Respecto al blog aumentar las aportaciones y recursos disponibles en la red referentes a la salud.